Hola chic@s, acabo de escribir una nueva descripción sobre la situación que estamos viviendo. Espero que os guste 😁🦠
En la historia de hoy te voy a hablar sobre una situación muy extraña que me ocurrió de pequeño debido a un virus llamado Covid-19. Todo empezó cuando nos anunciaron por las noticias de que en China había surgido un nuevo virus. Al principio, la gente no le dio importancia ya que no se sabía nada de él, pero en el país asiático ya empezaba a morir gente. Poco a poco el Covid-19 fue extendiéndose por todo el planeta azul sin capacidad de detenerlo, los hospitales empezaron a saturarse y la venta de mascarillas se incrementó hasta el límite de no tener más para la venta. Al final el Gobierno decidió declarar el estado de alarma dejándonos a todos confinados en nuestras casas y poco después, la OMS declaro aquella situación como pandemia. Debido al confinamiento se tuvieron que suspender todas las actividades no necesarias por lo que solo se podía salir a tirar la basura, pasear al perro o hacer la compra. El virus empezó a dejar muchos contagios y muertes por lo que el estado de alarma se prolongó. Tuvimos que empezar a dar clases telemáticas desde nuestras casas por videollamada, pero, aunque tuviéramos que ajustarnos a esas circunstancias y pasarlo mal debido a la pérdida de seres queridos, lo que hizo la pandemia fue ayudar al planeta de otra manera: avivando el amor por la naturaleza y el respeto entre todos. En definitiva, nos unió más que nunca.